Alrededor del esmalte de los dientes existen numerosos poros microscópicos, los cuales permiten el paso de distintos compuestos orgánicos que están presentes no solo en alimentos y bebidas, sino también de productos como el tabaco.
Los cuales al penetrar dentro de la dentina llegan a causar un proceso de decoloración en las piezas dentales, lo cual llega a afectar la imagen y estética de la sonrisa.
Sin embargo, tener una dentadura blanca ofrece la oportunidad de proyectar una imagen mucho más higiénica y también más profesional; y para conseguirla, se suele recurrir a una clínica de blanqueamiento dental.
Es decir, un tratamiento médico, el cual debe ser llevado a cabo por un profesional, cuyos resultados pueden apreciarse de forma inmediata.
¿Qué es en realidad el blanqueamiento dental?
Este tratamiento tiene sobre todo, el propósito de recuperar el tono natural de los dientes que debido al paso del tiempo y que por diversas razones, han llegado a oscurecerse; por eso existen ocasiones donde incluso, se puede conseguir una tonalidad más clara.
En cualquier caso, si quieres conocer realmente en qué consiste un blanqueamiento dental, te invitamos a seguir leyendo.
El blanqueamiento dental consiste en un tratamiento de estética, el cual implica cambiar la tonalidad que poseen las piezas dentales con el fin de lograr que luzcan un aspecto más blanco, saludable y atractivo.
Debido a sus características, se trata de un tratamiento que solo tiene que ser llevado a cabo por un profesional de la odontología, porque en caso de no ser realizado bajo la necesaria supervisión médica profesional, es posible que existan riesgos para el paciente.
Cabe señalar que contrario a lo que muchos piensan, supone un tratamiento odontológico, en lugar de ser solo estético; motivo por el cual el dentista debe llevar a cabo un estudio previo del paciente para conocer las posibles contraindicaciones.
En este sentido, es importante que cada uno de los tejidos presentes en la boca se encuentren sanos, incluyendo los dientes y también las encías. Además, el dentista debe cerciorarse que el proceso se realice con las mayores garantías posible para los pacientes.
De este modo se podrán prevenir los posibles riesgos asociados con la aplicación de esta técnica.
De la misma forma, el profesional de la odontología tendrá que encargarse de ofrecer información y recomendaciones para lograr que el procedimiento resulte exitoso.
También es apropiado señalar que el tratamiento empleado en el blanqueamiento dental implica la utilización de los denominados “agentes blanqueadores”, que normalmente consisten tanto en el peróxido de carbamida como de hidrógeno.
Dichos agentes se presentan en geles que poseen distintas concentraciones, los cuales causan la apertura de los poros microscópicos presentes en el esmalte dental, logrando que el peróxido penetre en el mismo hasta llegar a la dentina, donde actúa sobre los compuestos orgánicos acumulados dentro de ella.
Cabe decir, igualmente, que dichos compuestos orgánicos se encuentran divididos en partículas pequeñas, las cuales reflejan la luz de mejor manera, por lo que, en consecuencia, consiguen aclarar la tonalidad de los dientes.
Como ya mencionamos, este tratamiento tiene que ser realizado bajo la supervisión de un profesional dentro de un centro dental, y normalmente tiene una duración que ronda los 45 minutos, los cuales en ciertos casos pueden dividirse en diferentes sesiones.
A lo largo de las 2-3 semanas siguientes al tratamiento, suele aconsejarse no consumir ciertas bebidas y/o ciertos alimentos, por ejemplo, café, té, fresas, etc., debido a que existe el riesgo de que terminen tiñendo la superficie dental.
De manera que garantizar los resultados del blanqueamiento dental dependerá considerablemente de los hábitos que pueda tener cada paciente.
¿Qué beneficios ofrece el tratamiento de blanqueamiento dental?
Este tratamiento dental y estético se distingue por proporcionar numerosos beneficios, dentro de los cuales los más importantes son los siguientes:
Sonrisa más blanca inmediatamente
Sin duda, se trata del beneficio más notable e importante de este tratamiento, ya que proporciona un blanqueamiento más inmediato que el que ofrecen los kits de blanqueamiento que se pueden encontrar en las farmacias.
De igual manera, se distingue por contar con resultados que logran mantenerse a lo largo de un mayor tiempo, es decir, de varios años.
Optimiza la autoestima
Indudablemente, la apariencia física influye sobre el nivel de autoconfianza. Y es que tener una dentadura blanca ofrece a los pacientes la oportunidad de sentir mayor seguridad dentro de sus relaciones interpersonales y también dentro del campo laboral.
Es indoloro
El blanqueamiento dental no produce ningún tipo de dolor; por lo que aunque existe la posibilidad de experimentar un poco de incomodidad, lo cierto es que no resulta doloroso.
Rejuvenece el rostro
La dentadura tiene la capacidad de agregar una mayor edad, ya que, naturalmente, el envejecimiento suele venir acompañado no solo de arrugas, sino también de dientes débiles y de un tono amarillento.
Consejos básicos después de someterse a un blanqueamiento dental
Después de llevar a cabo el tratamiento de blanqueamiento dental, es muy recomendable tomar en cuenta y poner en práctica ciertos consejos para poder lograr que los dientes se mantengan en óptimas condiciones, por ejemplo, los mencionados a continuación:
- Evitar el consumo en exceso de aquellos productos, alimentos y/o bebidas, que pudieran llegar a teñir los dientes.
- Asegurarse de mantener una adecuada higiene bucal diaria.
- Evitar el consumo de tabaco.
- Si se presenta sensibilidad dental, conviene utilizar alguna pasta dental especialmente indicada para dientes sensibles.